En Bélgica, el VAR a menudo fue objeto de debate la temporada pasada, pero después de que un fantasma tomara el balón y lo tirara a otro lugar en Perú, al árbitro le hubiera gustado usar la ayuda de un estante de video.

¿Meta o no objetivo? Esa fue la pregunta durante un partido de copa entre FC Retamoso y Auquiato de Pampamarca. Un disparo del noble desconocido Retamoso desapareció a través de un agujero en la red y de repente quedó detrás del objetivo. El árbitro señaló el punto central, pero su asistente le devolvió el silbido.

Como no había VAR presente, el árbitro propuso una solución creativa. Fue a mirar en la pantalla de un fotógrafo a lo largo de las líneas laterales. Allí encontró la prueba: era un objetivo válido.

Fuente: The Guardian