Jones esquiva por los aires la defensa de los Bengals (Foto: AP Photo/Kirk Irwin)

Una verdadera noche de terror y espanto vivieron los Bengals en el Monday Night Football de la semana 8 de la NFL, al caer derrotados en Cleveland ante los Browns, con el abultado marcador de 13-32. La ausencia de Chase (por lesión) y la pasividad ofensiva de los felinos, fue una mezcla perfecta para que los marrones brindaran una alegría a su afición la noche de Halloween.

Sin duda alguna, la ausencia de Chase, quien presenta una lesión de cadera y lo mantendrá alejado de las canchas por 4 semanas, fue determinante para que los Bengals ofrecieran el peor encuentro de la temporada. Los Browns, quienes tienen récord negativo y se han mostrado como un equipo irregular que, suele perder la concentración en sus juegos, anoche mantuvieron a raya a la ofensiva bengalí y los dejaron en blancos en 3 tiempos. La defensiva de Cleveland pudo realizar hasta 4 capturas, 2 intercepciones y fastidiar a los receptores contrarios para impedir las intensiones de pases, generando una desconsideración en Joe Burrow, QB de los Bengals.

En tanto, gracias a la ayuda en defensa y la velocidad que mantuvieron en ofensiva, los Browns lograron una superioridad hasta de 25-0 al termino del tercer cuarto. Fue hasta el último periodo, que los visitantes pudieron anotar. Además, para completar la oscura noche de brujas que tuvieron los felinos hay que mencionar los desaciertos de McPherson en sus remates a gol, logrando acertar solo 1 de 4 intentos. En conclusión: Será una noche que nadie recordará en Cincinnati.

De esta manera, los Browns, eterno rival de división, aplastaron a los Bengals y amplia su racha ganadora en condición de local ante los felinos a 4 juegos. Dejando su récord en 3-5 en la temporada. Por su parte, los Bengals dejan su registro en 4-4 y pierden ligeramente la lucha por la cima de la AFC North, quedando a un juego por debajo de los Ravens. El próximo juego será el domingo, en condición de local ante Carolina Pathenrs, equipo que no anda bien y se presenta como una buena oportunidad para que los Bengals ajusten sus piezas y enderecen el camino.


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